viernes, 17 de agosto de 2007

La majestuosa sinfonía del silencio

Poder sentir la ausencia de los chirriantes sonidos que emanan de esta posada de grillos, mi único deseo.

Qué allá por donde vague siempre exista un instante donde pueda degustar la extraña sensación de no escuchar nada.

Momentos que no llegarán y que almacenados perecerán en el viejo baúl del desván.

Me quedará como consuelo escuchar al viajero errante, el único que sabe enteder mis pesares.

Sueño

Mi vida es sueño.

Me levanto y tengo sueño. Estoy aquí sentando y tengo sueño.

Tengo sueño por la tarde. Tengo sueño por la noche y tengo sueño mientras duermo.

Tengo sueño cuando sueño.

Al verla escrita, ¿qué palabra más extraña? - "Sueño".

No es la vida sueño por soñar, si no por estar siempre con sueño.

lunes, 13 de agosto de 2007

Rapenar

Siempre hice todo lo que pude, siempre hago todo lo que puedo. Parece ser que nunca es suficiente.

Qué extraña astilla de mis gloriosos pensamientos daña cada una de mis más bellas intenciones.

Tendré que sumerguirme en los albores de tiempo a encontrar en que momento se lastimó mi razón. No puedo creer que haga tanto mal el intentar que todos sean felices, aunque sea en brevísimas dosis.

Sin querer ser visionario, llegarán los días en los que sólo intentaré pensar en mi. Mejor me irá, seguro.

¡Maldita enfermedad! Pensar y encima intentar razonar.

Tristeza infinita, cuando al ver amanecer vislumbras que nada de lo que hagas o digas valdrá o se tendrá en una mínima consideración.

Seguid con vuestras suertes encontradas en el fondo de viejos barriles de roble, yo seguiré penando en las pantanosas aguas de mis sentimientos.

Hermoso amanecer
perdido en la otananza,
horizonte del sentir
que me llevas a llorar,
que me llevas a morir.