jueves, 25 de octubre de 2007

Otro mundo feliz

Si el tiempo acompaña podré realizar uno de mis grandes sueños el próximo mes.

Quién podía ni siquiera sospechar que en tan poco tiempo voy a poder presenciar la esencia y la semilla de la que surgió, casi con toda seguridad, la vida después de que los jinetes del apocalipsis acabaran con casi todo.

Desde luego parecía un sueño imposible que se cumplirá a orillas del Támesis.

Tras esta gran aventura, quizás ya sólo queden infinitas cosas por hacer. Pero lo que nadie me podrá quitar son las dos nuevas muescas marcadas a fuego en la culata de mi revólver.

Espero que el corazón pueda resistir tantas emociones en tan poco tiempo.

Bonzo.

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