viernes, 11 de enero de 2008

Cuadumbre y bamentos

No tiene sentido apuntar ya mis dudas en el cuarderno de incertidumbre que me acompaña siempre envuelto entre las sombras de las dudas y los temores de la ausencia. Lo sacaré del bolsillo de mi vieja gabardina y lo guardaré, no sin pesar, en el baúl de los lamentos. Echaré la llave y lo echaré al mar, sin miedo a que su contenido pueda perecer en la inmensa llanura de sal.

Me subo al desván, me refugio en las palabras. No hay peor guarida, pero las falsas palabras que jamás podrán expresar por si mismas nada, según creo adivinar, serán mi ansiada cabaña en el espeso bosque de los sueños soñados, de los viajes perdidos, de caminos no transitados, de los viejos amigos, al fin y al cabo, lugar donde guardo la brisa de viejas canciones y bellos momentos.

Qué la música y los pasos de mi sangre me acompañen por los mares que navegue sin rumbo. Le suplico al viento que cuando me vea dudar siempre sople hacia el Sur. Porque si algo he sabido es que sólo el alma puede recorrer los extraños caminos de las sensanciones perdidas. Los pasos una vez iniciados nunca volverán atrás, os ruego que os pille a todos confesados, no habrá tiempo para perdir perdón ni para falsos arrepentimientos.

Trovador de lamentos que moras en mi, narra mis amargas tristezas.
Soñador de silencios que me visitas en las frías noches de invierno, vuelveme sereno.
Pastor de las altas cumbres, sácame de esto.

Buncuche.

martes, 8 de enero de 2008

Un hombre y dos destinos inalcanzables

Y si algo me enseño la vida es que todo es mentira. Sólo tenemos dos caminos, que nunca recorreremos, que poder tomar:

- El camino de la fidelidad con los sueños de juventud. Que la vida no se pase sin sentir haber hecho algo por nosotros y por la humanidad. Todos llevamos atrapado en nuestra alma ese ardor revolucionario. Sentir que podemos cambiar las cosas para mejor. Hacer de la vida algo digno para todos. Vagar por los caminos más ocultos de la existencia con una mochila al hombro, bebiendo del agua almacenada en la huella de un caballo y comiendo frutos silvestres. No dejarse vencer si haber luchado hasta el fin.

- El camino de la salvación. Poder andar el camino sin complicaciones, sin hacer nunca nada que no nos nazca de dentro. No vivir pendiente de que un reloj marque nuestros pasos por esta vida dura y sinuosa. Poder desayunar en Ushuaia y ver la puesta de Sol en el Malecon. Amanecer entre las ascuas de la lumbre en cualquier bosque perdido de Canadá y mañana soñar con navegar por los mares de sur. Reir con una botella de vodka en cualquier gélido páramo de Siberia o simplemente tomar un par de cañas en cualquier tasca de Madrid. Dormir sobre las aguas del mar Muerto, despertar sobre las ruinas de Troya. O simplemente apostar una ficha de 1000 dólares en Las Vegas o jugar una partida de pokér con John Wayne a las orillas de Rio Grande. Recorrer con "el barquero" la sierra de Ronda.

Dos senderos tapados por la insana cordura y la maldad de los hombres.

Si pudiese al menos poner un pie en uno de esos caminos, aúnque sólo fuese para andar un par de metros, ..... ¡qué felicidad!.

miércoles, 2 de enero de 2008

La liga de la razón

Y después de un día viene otro, y no hay más.

Ni dije ni me dijeron, ni di ni recibí. Tengo tantas ganas de nada, que ya no puedo.

Nada cambia. Todo sigue igual, o sea, mal.

Si les ayudas te lo pagan en golpes, que más se puede decir.

Rodeado del absurdo y sin saber si lo pongo yo o me lo dan los demás.

Tendré que ir pensando en dejar la competición ...